A la luz de la Luna (Bernard)

Mire la gran estructura de la torre Eiffel y por mi mente pasaron todas aquellas cosas que decían sobre ella.
Era de admitir que aquella estructura era una gran obra, inspiraba, algo que ocasionaba un cambio en tu modo de pensar y ver a cosas.
De día se podía observar su arquitectura, pero de noche a la luz de la luna, le daba un aspecto mas romántico a la ciudad.
Reí ante tal pensamiento. Camine a lo largo de el gran espacio en donde estaba ubicada, y metí las manos en los bolsillos de mi chaqueta para calentarlas un poco.
Gire y vi desde lo lejos el gran terreno de hierba en donde solía jugar con Angie,durante las tardes.
Una sonrisa salio de mis labios al recordar a mi pequeña hermana.
Si, aquel lugar era un lugar perfecto para sentirse feliz.

Me gire al oír una voz conocida.
- Buenas noches Bernard- le salude sonriendo. Habia escuchado muchas cosas sobre el, además de el hecho que siempre estaba buscando información sobre el LPD. Pero no me gustaba juzgar a las personas por las opiniones de los demas. Dirigi mi mirada denuevo hacia la gran torre y recorde como me habia sentido el dia en que Madame Danete me recibio en el club sin juzgar mi clase social y me habia tratado como a una hija. Si ella lo habia hecho conmigo quien era yo para negarle esa oportunidad a otras personas.- ¿Disfrutando de la noche?- le pregunte.

-Correcto- le respondí sonriendo de medio lado- Pues la verdad no me importa soportar el frío, la vista es hermosa.¿No es cierto?- le pregunte. Las luces que alumbraban los alrededores en combinación a al luna lo convertía en un gran espectáculo.Desde pequeña había tenido el sueño de subir hasta el ultimo piso. Mi
madre me traía aquí y jugaba conmigo de la misma manera que yo hacia
con Angie. Pero teniamos muchos gastos asi que me tenia que conformar
con escuchar a las personas que pasaban susurrar lo hermosa que era
Paris desde las alturas.- Lastima que no todas las noches lo puedo ver, justamente porque trabajo en Le Plaisir Dangereux.

-La verdad no...- le dije con un sonrisa triste.- Nunca he subido, ni de noche ni durante el día.- sonreí por lo ultimo que dijo- Al parecer nadie te tiene mucho cariño.- le pregunte girándome para quedar al frente de el.- ¿Por que Bernard?- le pregunte.

Lo observe sin demostrar en mis cara ningún gesto.Luego sonreí.
-Pues, ya que el dinero lo conseguiste hablando sobre mi trabajo, deberías hacerlo- le dije luego me quede pensativa- Pero como no nos conocemos, ¿Por que o harías?- le pregunte.

Sonrei ampliamente.
- No, no te abandonare- reí- Subiré contigo solo porque tus excusas me han parecido originales.- saque una mano del bolsillo y coloque detrás de mi oreja un mechón de cabello que había sido movido por el viento.- Bueno, no todas ¿Miedo a la oscuridad?- le pregunte riendo.

Reí.
- Debe de haber muchas personas esperando que cometas algún error¿no?- le pregunte seria.Aquel trabajo debía ser difícil, muchas veces quedabas entre decir la verdad a pesar de lo cruel que fuera y ganarte enemigos o decir una mentira y quedar bien con todos. Sonrei cuando nos acercamos a una pequeña taquilla para poder subir.- Me hace mucha ilusión subir- le dije sonriéndome- Si todo es tan hermoso como dicen recuerdame que te debo un favor.

Estaba tan ansiosa de subir que parecía un niño al que acababan de darle un dulce. Miraba todo lo que estaba a mi alrededor como si fuera algo nuevo para mi. El sonido del ascensor me hizo devolver la mirada al frente, y entramos en el junto con otras dos parejas mas. NOs colocamos en la parte de atras de este, ya que fuimos los primeros en entrar-¿Subes con frecuencia?

- Mi hermana y yo hacemos lo mismo- mencione- Bueno, algo parecido. Cuando ella no esta en clases y yo no estoy trabajando, solimos venir, a jugar.- le dije con un sonrisa recordando a mi pequeña hermana- Me gustaría que ella estuviera aquí.- El ascensor se detuvo y sus puertas se abrieron.Mi corazón di un vuelco, estaba a solo unos pasos de cumplir uno de mis sueños.

- Si, tiene 4 años- le dije -Si, creo que ella se merece ver esto, es una niña muy tierna.- le dije con ilusión.
Tome su mano cuando la extendió y me quede de piedra cuando a pesar de todavía estábamos un poco lejos, se podía ver toda París.Me acerque corriendo a la baranda tirando de el.
- ¡Oh por dios!- le dije emocionada- ¡Esto es hermoso!

-¿Por qué ríes?- le pregunte apartando la mirada de París.- Hey,¿Que es tan gracioso?- le pregunte riendo contagiada.

Lo mire sonriendo y luego me asome al igual que el había hecho.
- ¡Es cierto! - dije riendo- Creo que si miro con mas atención puedo ver mi edificio - Bromee.La vista era un gran espectáculo.Las luces, los lugares...Era como ver a Francia a pequeña escala. Cerré los ojos, y sentí el viento golpear en mi cara- Podría vivir aquí arriba.

Abrí los ojos y lo mire.
- Yo no, creo que me gustaría vivir aquí.- le dije pensativa- Apartada de todo, sin nadie que te critique- luego reí-... y claro disfrutar de este paisaje.
Mire a los lados y recordé la excusa por la que lo había acompañado.
-¿Todavía le temes a la oscuridad?- le pregunte - ¿O ya has superado un poco ese miedo?